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Teología de la Liberación Los libros sagrados, no son libros de teología, sino de teologías, en un solo libro de la Biblia podemos encontrar varias teologías. Cada teología es una forma diferente de interpretar a Dios, pero en medio de todas las teologías, existe una primaria. Las teologías las podemos agrupar en dos tipos: teología de la liberación y teologías de opresión. Una interpreta a Dios libertador y la otra a un Dios neutral, imparcial, que no distingue entre oprimido y opresor. Esto es lo que en la teología primaria marca la diferencia entre Yahvé el Dios justo y los báales, estos últimos son dioses mudos, por lo tanto cómplices silentes de las injusticias. Esta es una de las razones por las cuales los opresores prefieren a Baal, en vez de Yahvé. El Dios verdadero se revela al mundo precisamente a partir de una situación de opresión que niega su voluntad. Desde esta situación se revela como el que hace distinción entre oprimido y opresor. El Dios que oye y siente el gemir de los oprimidos, que toma partido por ellos y contra los opresores. El Dios que no se queda en las alturas contemplando el drama humano, sino que se hace presente en la historia, que se compromete a la liberación. El Dios que no niega el conflicto, ni trata de evitarlo, sino que se introduce en medio de el y se hace protagonista de primera fila en las luchas de los oprimidos por liberarse. Pero Yahvé exige a los liberados organizarse y vivir como pueblos justos, santos, fraternos bajo su guía, pueblos familias, pueblos hermanos. Desde el orden religioso el primer libro de la Biblia es el Génesis, ahora desde el orden histórico el éxodo ocurrió antes de desaparecer el libro del Génesis. Lo que se cree es que este libro fue escrito por Moisés. Este no lo escribió en Egipto, sino después del éxodo, primero fue el éxodo y luego fue