viernes, 6 de febrero de 2009
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Esta notificación me hace ver que el tema islámico tiene actualidad en Venezuela, que es el momento de dar impulso a la propuesta teocratica, por lo que mi sacrificio tiene que estar enmarcado en este momento.
Hoy 14 de junio del 2008, finalice de leer la Biblia por segunda vez en mi prisión, le escribí una dedicatoria y un mensaje de promoción del orden teocrático, esta Biblia se la daré como recuerdo a la persona que me atienda en mi gravedad. Después del desmayo sufrido, siento mucha paz y un poco de debilidad.
El día 15 de junio me dio un dolor inmenso en las piernas, lo sentía en la caña de los huesos, el dolor me duro hasta tarde de la noche, finalmente me quede dormido y dormí profundamente.
Hoy 16 amanecí con dolor en la cintura a la altura de los riñones, es un dolor muy fuerte, se me hace difícil hacer las oraciones, pero las hago así mismo soportando el dolor el cual ofrezco a Allah como parte de este sacrificio por la teocracia.
Al medio día vino a visitarnos Monseñor Giacinto Berloco, nuncio apostólico en Venezuela, luego del saludo, le di un papel con una nota solicitándole un ejemplar de la Biblia latinoamericana y un diccionario bíblico arqueológico, también le pedí un ejemplar de la Biblia para cada prisionero político y para cada preso común.
El día lo he pasado con este dolor, pedí una visita del medico para pedirle un calmante, pero no ha llegado, esto fue a las tres de la tarde y van a ser las ocho de la noche.
Estoy leyendo un nuevo libro, este se titula concepto de la guerra en el Islam, por Muhammad Abu Zahra.
He pensado que es necesario contar todo lo ocurrido con el caso Hezbulah Venezuela y mencionar a todos los que de manera directa e indirecta participamos, tengo que comprender que solo lo que quede escrito quedara para la historia, voy a desaparecer físicamente y es mejor aclararlo todo, no puedo pensar en el bien o el mal que le pueda hacer a los que colaboraron,
