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militares involucradas en la lucha por un mundo teocrático, esta es la gran conspiración mundial de Dios. En verdad que Dios es el mejor conspirador. La conspiración divina ha llegado a Venezuela, por medio del partido de Dios venezolano y la teología política venezolana de la teocracia. Como siempre ocurre en el proyecto de Dios este nace en un lugar humilde (territorio indígena) y de lo despreciado del mundo (Un delincuente). Dios pretende desconcertar y confundir a los que se fijan en lo aparente y no en aquello en lo que Dios se fija, como en el caso del hombre que llego al infierno junto con su perro y su caballo y se salvo del infierno porque no lo engañaron las apariencias; así Dios presenta su proyecto y su partido a Venezuela y a América Latina, solo los humildes podrán saber si es de Dios, los arrogantes no lo sabrán para que se pierdan, pues Dios no ama arrogancia. La teocracia en Venezuela y en América Latina se trata de una clara conspiración del orden divino contra el orden humano, de la teocracia contra la democracia, del sistema islámico contra los sistemas capitalista y socialista, desde este aspecto ha de ser visto el partido de Dios venezolano y latinoamericano hezbollah, como un partido conspirador desde lo divino desde Dios. Dios ha de gobernar a Venezuela y América mediante el orden teológico-político teocrático y es hacia allá, hacia donde apunta la conspiración divina. En esto el partido de Dios ha de unir fuerzas con otros movimientos teocráticos del mundo islámico, hacia la teocracia mundial (el gobierno mundial de Dios). ¿Cual es la situación de la teocracia? Con el caso Hezbollah Venezuela, suena por primera vez en estas tierras la palabra teocracia islámica como una propuesta político religiosa para esta región, como propuesta de orden de cosas, y como alternativa política en contra posición a la democracia. La democracia y los sistemas capitalistas y socialistas, son ideológicos políticos, mientras que la teocracia no es ideológica, sino teológica y teológica política.