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3) El sistema es un modelo político de administración de la soberanía. 4) El imperio es la nación dominante del mundo. 5) El líder es el presidente del imperio. Cuando el mundo no es teocrático, en el presidente del imperio se encarna el Shaitan y es desde donde oprime a la humanidad. En este sentido ideológico el presidente de EAU. es el Shaitan encarnado. Las guerras del Shaitan La desmedida ambición del poder y las riquezas, inspira al imperio para hacerle la guerra a su propio mundo, y al mundo teocrático islámico. Cruzadas de ocupación, derrocamiento de gobiernos, teocráticos islámicos y colocación de gobiernos, títeres (Afganistán, caso Taliban, Pakistán, Irak), imposición del orden político democrático y el sistema político capitalista, por medio de la guerra. La ONU y la OTAN, son alianzas para la conquista, colonización y saqueo, es la asociación de las súper potencias arrogantes para la repartición del planeta. Si se analiza esto con verdadera profundidad, objetividad e imparcialidad, con una mentalidad critica y reflexiva, si se hace de esta manera nos hallaremos frente a frente con el poder real del Shaitan, poder de destrucción y muerte, oculto bajo la mascara de la libertad y los derechos del hombre. Todo este maligno plan actuando desde la democracia, desde Occidente. La religión occidental nos presenta a Satanás como un personaje invisible, mitológico, este concepto de Satanás profundamente supersticioso, enraizado en la conciencia y en la subconciencia de los pueblos crea una ilusión mundial, una distracción de la realidad, un enajenamiento mental el opio religioso de los pueblos como dijo Marx el mayor engaño colectivo de la historia, mientras el verdadero Shaitan cumple su fatídica Misión en la humanidad, misión de muerte y robo (sita), llenar de odio y de maldad al mundo, sus ideologías políticas capitalista y socialista son ideologías de odio.