lunes, 9 de febrero de 2009

37

El presidente Chávez ordeno enviar una comision del Fondo Único Social, para que nos ayudaran con nuestro proyecto de desarrollo sustentable. También me entrego un oficio para el gobernador Arias Cárdenas, donde se le pedía suspender todas las actuaciones contra la comunidad revolucionaria y las persecuciones contra mi persona. Además se le notificaba que la presidencia pasaba a conocer del caso. Me enviaron a FUS Fondo Único Social, donde me atendieron los comandantes Willians Fariñas e Iván Ballesteros. Estos me informaron que tenían instrucciones de viajar a Maracaibo y visitar la ocupación, para conocer de manera personal, para colaborar con nosotros. Me dieron los viáticos y pasajes para regresar y me dijeron que ya no tuviera temor que todo estaba resuelto. El mismo día de mi llegada reuní a la comunidad y le di cuenta de mis diligencias y de los resultados de estas, relatándoles con detalles lo ocurrido. Les dije que teníamos que prepararnos para la visita de estas personalidades, luego escogí una delegación para visitar la gobernación y entregar la carta de la presidencia. La delegación estuvo integrada por: Ana Cleotilde González, Alirio Rodríguez y Arturo Montiél. También compramos una tela e hicimos una pancarta que decía: Bienvenidos a la comunidad revolucionaria indígena Jehová Nisi, le dibuje signos de las castas wayuu y la figura de una wayuu con ache’pa (pintura wayuu a base de hongo en la cara). Esta pancarta la colocamos a la orilla de la carretera, entre el Níspero y La Gallera. El día señalado llego la comisión del FUS, enviada por el presidente Chávez, los comandantes Willians Fariñas y Iván Ballesteros, mas una comisión del gobierno regional. Reuní la comunidad para escuchar a la comisión presidencial. Estando atendiendo a la comisión se aparecieron los contra revolucionarios Eudo Urdaneta, Julio Barrios, Rita Ramírez y Cecilia Jayariyu, todos de Acción Democrática. Estos pidieron hablar con los visitantes, cosa que evitamos, pues se proponían sabotear cualquier apoyo que pudiera significar un triunfo de la revolución wayuu. Su estrategia, usar la denuncia como arma política, como manera de desvirtuar y hacer fracasar el proyecto revolucionario.